sábado, 16 de mayo de 2020

El castillo de Hinojosa de la Sierra. Soria


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Castillos señoriales nobiliarios y episcopales en Castilla–La Mancha (siglos XIV y XV) José Miguel Muñoz Jiménez. Vocal de la Junta Nacional de la Asociación Española de Amigos de los Castillos.


El sucesor del arzobispo de Toledo llamada Sancho de Rojas fue Juan Martínez de Contreras (1423-1434), que con el arquitecto Alvar Martínez labró, además de la capilla de San Ildefonso para su sepultura, el cuerpo cuadrado de la Torre de las Campanas de la Catedral de Toledo, a partir de 1424, con sus cuatro pisos interiores que destinados a tesoro, vivienda, cárcel y campanario, podrían valorarse por su tamaño y potencia de muros como una obra militar. 

Además levantó el maravilloso Salón de Concilios del Palacio de Alcalá de Henares y la Torre del Ochavo del mismo edificio, y fue el constructor a título particular del castillo soriano de Hinojosa de la Sierra

Sin embargo, fue acusado por su sucesor Juan de Cerezuela (1434-1442), hermano de don Álvaro de Luna, de haber descuidado las fortalezas del arzobispado. 

Para subsanarlo, Cerezuela consiguió recuperar una parte del legado dado por Contreras a su familia. 


Juan de Cerezuela, nacido en Cañete (Cuenca), era hermano de madre (María Fernández de Jarana, La Cañeta) de Don Álvaro de Luna, el gran Condestable de Castilla.

Gracias a la influencia de su medio hermano, favorito o privado del rey Juan II de Castilla, consiguió diversas sedes episcopales, comenzando por Osma, pasando después a ser arzobispo de Sevilla (tras haber desplazado a Diego de Anaya), y por fin, en 1434, Arzobispo de Toledo hasta 1442.


Ambos hermanos Luna debieron disfrutar para la renovación de sus castillos de la pericia de un nuevo arquitecto, el flamenco-borgoñón Anequin Egas Cueman o de Bruselas. Éste, introductor del estilo gótico flamenco en Toledo, es el probable tracista de la reforma palaciega que a partir de 1438 hizo el Condestable en el castillo de Escalona, con la labra de una preciosa capilla que tanta importancia tendrá en la nueva decoración palaciega de tantas fortalezas de la región. Del mismo modo fue maestro de obras de la catedral durante los obispados de Gutierre Álvarez de Toledo (1442-1446) y de Alfonso Carrillo de Acuña (1446-1482), el más largo mandato del periodo bajomedieval.


Uno de los hitos más importantes como prelado del arzobispo Sancho de Rojas fue la erección de la capilla de San Pedro en la Catedral de Toledo

Fundó varias capellanías y dotó la capilla, lugar elegido para su enterramiento, con numerosos bienes.

Tres Obispos de la diócesis de Osma en el siglo XIV. 

            En la primera mitad del siglo XV, es titular del obispado de Osma don Juan de Cerezuela y Luna[1]. Es don Juan de Cerezuela y Luna hermanastro de don Álvaro de Luna, I conde de San Esteban de Gormaz. En el año1432, durante el obispado de don Pedro de Castilla y Eril” consiguió el Condestable D. Alvaro de Luna del Rey D. Juan el que le hiciera merced para si y sus sucesores de la tenencia de la ciudad de Osma y de las villas de Gormaz, Ucero y Cabrejas, señoríos de la Iglesia de Osma, á D. Alvaro se le disputó la posesion”. En el año 1440, “el Condestable recibe Osma con toda su tierra, altillo, tierra, vasallos y jurisdicción: aldeas, lugares,”. En el año 1450 don Álvaro de Luna da poder original a Juan de Guzmán, alcayde de su castillo de San Esteban de Gormaz, para que en su nombre “pudiese tomar posesión de la ciudad, villa ó lugar de Osma, con todas sus tierras, jurisdicción, de que el Rey Don Juan le había hecho merced”. El obispado de Osma recupera todas las mercedes hechas al Condestable con las posesiones y bienes del Obispado tras el ajusticiamiento de don Álvaro en 1453.
            
Sucede don Juan De Cerezuela y Luna en el obispado de Osma en 1426 a don Alonso Carrillo de Albornoz que había sido administrador de esta Diócesis desde 1411 y le sucede a él don Pedro de Castilla y Eril que será titular de este Obispado desde el año 1432 hasta el 1440, “D. Alvaro de Luna, valiéndose de esta ocasion, hizo elegir á su hermano D. Juan de Zerezuela por Arzobispo de aquella Iglesia, habiendo gobernado la de Osma cerca de siete años, sin haber hecho cosa buena en ella”.
            
Desde mediados del siglo XIV hasta mediados del siglo XV, la aragonesa Casa de Luna unida por repetidos vínculos familiares con la conquense Casa de Albornoz tendrá en sus manos y en repetidas ocasiones la titularidad del obispado de Osma así como la del arzobispado de Toledo.
            
Juan de Cerezuela y Luna, nacido en Cañete, Cuenca, era hermano de madre de don Álvaro de Luna. Se dice de quien llegaría a ser todopoderoso favorito de Juan II de Castilla y condestable de este Reino que, Presumía mucho de su linaje, no acordándose de la humildad de su madre -“de la humilde o baxa de su madre dice de él Pérez de Guzmán-. En efecto su madre, María Fernández de Járaba, La Cañeta, era hija del alcaide de la fortaleza de Cañete, y su padre el propio señor de Cañete don Álvaro Martínez de Luna. Parece que María había tenido un hijo anteriormente con un alcalde apellidado Cerezuela. Éste es don Juan de Cerezuela que toma el apellido Luna de la Casa de su importante hermano. “Llamábase su madre la Cañeta porque era de un lugar que se llama Cañete cerca de Cuenca, que ahora es de Diego Hurtado: y el Alcayde de allí, que se llamaba Cerezuela, ovo un hijo en ella, que fué hermano de madre del Condestable. Este su hermano se llamó Don Juan de Cerezuela que fué hermano de madre, porque entrambos eran hijos de María de Cañete”. Crónica de don Álvaro de Luna.
            
Don Juan de Cerezuela y Luna por influencia de su hermanastro don Álvaro de Luna llegó a ser obispo de Osma desde 1426 a 1432- el número 40 de los obispos de la diócesis de Osma desde su fundación en 597 cuando formaba parte de la provincia eclesiástica de Toledo-. “D. Alvaro, influyó con el Cardenal D. Alonso Carrillo á que dexase la administracion del Obispado de Osma, y se contentára con el de Sigüenza”.Por la promocion de D. Alonso Carrillo á la administracion de la Iglesia de Sigüenza, se dió el Obispado de Osma á D. Juan de Zerezuela, hijo de Juan, Alcaide de Cañete , y de Maria de Urazandi. Era hermano uterino del Condestable D. Alvaro de Luna, que estaba ya en la privanza del Rey D. Juan el II., y Conde de S. Esteban de Gormaz”.
            
Del obispado de Osma pasa al arzobispado de Sevilla, desplazando a Diego de Anaya, no llegó a residir en Sevilla y pasó enseguida a la diócesis de Toledo, y por fin, en 1434, arzobispo de Toledo[2] hasta su muerte en 1442 en sucesión de Don Juan Martínez de Contreras que lo fue hasta ese año de 1434 cuando muere. Lo había sido desde el año 1423. Está enterrado don Juan Martínez de Contreras en la capilla consagrada a San Ildefonso de la catedral de Toledo, en un sepulcro excavado en el muro izquierdo que lleva su estatua. La construcción de esta capilla funeraria, que no vio terminada, fue ordenada por su antecesor en el Arzobispado don Gil Álvarez de Albornoz y Luna, arzobispo de Toledo entre 1338 y 1350 y desde 1350 cardenal de la Iglesia Católica. Don Gil Álvarez de Albornoz muere en Viterbo, Italia, el 24 de agosto de 1367. Sus restos son trasladados a su capilla en 1372. Su sepulcro se muestra exento en el centro de esta Capilla.
            
Contigua a la capilla de San Ildefonso está la capilla de Santiago o del Condestable, “Yace sepultado este gran varón en la Santa Iglesia de Toledo en su Capilla que edificó á nuestro glorioso Apóstol y Patrón Santiago, donde permanece su vulto de marmol en una cama de alabastro, y esculpido allí este epitafio: aqui yace el ilustre señor d. Alvaro de luna, maestre de santiago, condestable que fué de castilla, el qual, despues de haber tenido la gobernacion de estos reinos por muchos años, fenescio sus dias en el mes de julio año del señor de 1453”. No fue en Julio, sino el 2 de junio. Aunque se puede leer también la incorrecta fecha del 3 de julio.
            
Don Álvaro de Luna mandó construir la capilla de Santiago y la fundó como lugar de enterramiento para él y su familia. Cuando murió, la capilla estaba todavía en obras así que su terminación corrió a cargo de su esposa doña Juana de Pimentel y más tarde de su hija doña María de Luna y Pimental que fue quien mandó esculpir los sarcófagos de sus padres en 1498, probable fecha de la terminación de la capilla.. Don Álvaro de Luna fue maestre de la orden de Santiago desde 1445 a 1453, y con el hábito de Maestre lo podemos ver en el retablo de su capilla de Santiago y rodeado por caballeros de la Orden. “Aqui está con la Condesa de Montalvan Doña Juana Pimentel su segunda muger: con dos bultos de marmol que los representan. Dotó la Condesa en esta Capilla tres Capellanías, que son á provisión del Cabildo, y dexó para ellas un juro en el paso de la Torre de Estevan Hambran”.
            
En el año 1430 don Juan Martínez de Contreras, arzobispo de Toledo desde 1422 a 1434, canciller mayor de Castilla dona a su pariente don Álvaro de Luna tres Capillas en la Santa Iglesia de Toledo las Capillas de San Eugenio, Santo Tomás y Santiago para construir su capilla funeraria. En 1434, don Álvaro de Luna hace dotaciones a su capilla de Santiago y a sus capellanes en la Santa Iglesia de Toledo. En los laterales de la capilla del Condestable se encuentran enterrados don Juan de Luna, hijo de don Álvaro de Luna, y entre otros el arzobispo don Pedro de Luna, tío del Condestable, don Juan de Cerezuela y Luna, hermanastro del Condestable, y don Álvaro de Luna padre del Condestable y de don Juan de Cerezuela.
            
En el obispado de Osma, don Juan de Cerezuela y Luna sucede en el año 1426 a su primo paterno don Alonso Carrillo de Albornoz y Luna que lo había sido desde 1411 y le sucede a él don Pedro de Castilla y Eril que será titular de este obispado desde 1432 a 1440.
            
Fue la madre de don Alonso Carrillo de Albornoz y Luna doña Urraca Álvarez de Albornoz y Luna, hija del V señor de Albornoz en Cuenca. Es doña Urraca hermana de doña Teresa Álvarez de Albornoz y Luna casada con su primo segundo don Juan Martínez de Luna; era don Juan Martínez de Luna primo hermano del padre de doña Teresa. La abuela paterna de doña Urraca y doña Teresa pertenecía a la Casa de Luna. Son doña Teresa y don Juan los abuelos paternos de don Álvaro de Luna. Era tío abuelo de don Alonso Carrillo de Albornoz don Gil Álvarez de Albornoz y Luna, arzobispo de Toledo entre 1338 y 1350 y cardenal de la Iglesia Católica desde 1350. En su magnifico sepulcro tiene este epitafio, “AQUI YACE EL MUy REVERENDO PARE D. JUAN DE ZEREZUELA, ARZOBISPO DE TOLEDO: FINO MARTES A III. DIAS DE FEBRERO DE MIL E QUATROCIENTOS E QUARENTA E DOS AÑOS EN TALAYERA”.
            
Don Alonso Carrillo de Albornoz y Luna, primo hermano del padre del don Álvaro de Luna y de don Juan de Cerezuela y Luna, fue destinado al estado eclesiástico como hijo no primogénito. Fue arcediano de Cuenca, cardenal diácono de San Eustaquio en el Vaticano 1408, protonotario apostólico del Papa Eugenio IV y administrador de la diócesis de Salamanca. Murió en Basilea, Suiza, el 14 de marzo de 1434. El 28 de noviembre de 1411 fue nombrado administrador de la diócesis de Osma- lo fue hasta 1426- y abad de la Colegiata San Miguel Arcángel de Alfaro, puestos que ocupó hasta su muerte. Siendo administrador de la diócesis de Osma fue nombrado obispo de Sigüenza en 1422, nunca residió en esta diócesis. “Dió el Cardenal D. Alonso á la Iglesia de Osma una capa de brocado blanco bordada de oro de mucho valor, de quien dicen los Anales que fué obra singular, rara y costosa”.
            
Permaneció fiel en principio a Benedicto XIII, el Papa Luna. Tal vez una razón para ello eran sus vínculos familiares ya que el Papa Luna era cuñado de su tía doña Teresa Álvarez de Albornoz y Luna. Pero ello no impidió que finalmente abandonara su causa. El 11 de noviembre de 1417, Martín Ves elegido Papa durante el concilio de Constanza, en un cónclave que depuso a Benedicto XIII. El Papa Martín V muere en el año 1431 y los Cardenales piensan en don Alonso Carrillo de Albornoz para la sucesión en el Papado. El no acepta su elevación al Papado y apoya la elección de Eugenio IV. “La muerte del Cardenal fue de gran daño en este tiempo, porque era un hombre muy notable y gran letrado, y servía mucho al Rey y sostenía a todos los castellanos que en aquellas partes iban. Hubo el Rey de su fallecimiento gran dolor y vistió paños negros, y asimismo la Reina y el Príncipe y todos los grandes que en la Corte estaban”.
            
Don Pedro de Castilla y Eril, nieto de Pedro I de Castilla, nace en Soria en 1394. Arcediano de Alarcón en Cuenca. Es obispo de Osma desde el año 1432 al 1440 en sucesión de don Juan de Cerezuela y Luna que lo es desde 1426 a 1432. En este año don Juan de Cerezuela y Luna es nombrado arzobispo de Sevilla. Muere en el año 1461. Obispo de Palencia desde 1439 a 1464. Don Pedro de Castilla y Eril tiene una hermana, Constanza de Castilla y Eril, que ingresó en el monasterio de Santo Domingo de Madrid. Muere en 1478.
            
En 1354, Pedro I casa con doña Juana de Castro, señora de Dueñas y Ponferrada. Vivían tanto su esposa, doña Blanca de Navarra, como su amante, doña María de Padilla. Los casó el obispo de Salamanca en Cuéllar y Juana de Castro toma el título de reina. De este matrimonio nace don Juan de Castilla y Castro en 1355, muere en 1405. Fue encarcelado por su tío Enrique II en la fortaleza de Soria, puede que en el castillo del que poco queda, donde era alcaide don Beltrán de Eril con cuya hija doña Elvira de Eril y Falces casa. Don Juan tenía los derechos sucesorios de Pedro I al haber fallecido el único varón, Alfonso, habido con doña Blanca de Navarra.
            
Enrique III, nieto de Pedro I y primo segundo de don Pedro de Eril y Falces, temiendo posibles problemas sucesorios con su primo segundo decide mantener en prisión a don Pedro de Castilla y Eril. En el año 1405, contando don Pedro unos 11años, parece que a ruegos de la reina Catalina, prima hermana de don Pedro y segunda de su marido el Rey, y coincidiendo con el nacimiento del futuro Juan II el Rey decide levantar la prisión a don Pedro y dispone que sigua estudios y carrera en la Iglesia.  Le concede el arcedianato de Alarcón en la Catedral de Cuenca. Pasó la juventud y los estudios en Salamanca y en esta ciudad es padre con doña Maria Fernández Bernal de al menos tres hijos a los que legitimó. Con doña Isabel Drochelin fue padre de al menos otros cuatro hijos. Acabados sus estudios recibe el obispado de Osma en 1432, “En lugar de D. Juan de Zerezuela ó de Luna, eligiéron, á D. Pedro de Castilla. Fué nieto este Prelado del Rey D. Pedro, é hijo del Infante D. Juan de Castilla”. 

Al poco de ser elevado al obispado de Osma tiene que reconocer a don Álvaro de Luna la tenencia de la ciudad de Osma y de las villas de Gormaz, Ucero y Cabrejas al obtener el condestable este privilegio de Juan II. Volverán estos lugares al Obispado tras el ajusticiamiento del Condestable en 1453. Al año siguiente, en 1433, confirma como obispo de Osma el privilegio que da Juan II al condestable don Álvaro de Luna de los maravedíes que correspondían al Rey en la villa de San Esteban de Gormaz. En 1435 don Álvaro de Luna y doña Juana Pimentel tienen su primer hijo a quien llama Juan en honor de Juan II. Son sus padrinos los Reyes y es bautizado por el obispo de Osma. Al año siguiente don Pedro de Eril y Falces aprueba y autoriza en virtud de bula del Papa Eugenio IV el trueque y cambio que se hizo por el arzobispo de Toledo don Juan de Cerezuela y Luna, y el Cabildo de su Santa Iglesia de una parte, y de otra don Álvaro de Luna, condestable de Castilla, dando los primeros la villa de El Alamín, y el segundo 40.000 maravedíes de renta y juro cada año.
            
En el año 1437, concede el uso de capas de oro a los prebendados de la colegiata de san Pedro en Soria, así como que sean superiores al resto de los clérigos de Soria y su Tierra. En este mismo año era ya priora del convento de Santo Domingo el Real de Madrid su hermana doña Constanza que resuelve traer a su Iglesia el cuerpo de su abuelo el rey Pedro I. Don Pedro dio orden para que se construyera en dicha Iglesia una capilla a su costa, y que se colocara en ella a su abuelo y el cuerpo de don Juan de Castilla su padre. Esto se realiza dos años después.
            
Ambos consiguieron de su primo Juan II el permiso para reunir los cadáveres de su padre y de su abuelo. Trasladaron el cuerpo de Pedro I desde Montiel y el de su padre desde la concatedral de San Pedro de Soria hasta el convento de Santo Domingo de Madrid. La que presidía el enterramiento de Pedro I se conserva en el Museo Arqueológico Nacional de España tras ser derribado el convento de Santo Domingo en el siglo XIX. La de Juan de Castilla desapareció cuando el monasterio fue derruido.
            
En el año 1440 estaba vacante el obispado de Palencia. Fue promovido a la sede palentina don Pedro de Castilla y Eril. Había gobernado la de Osma cerca de ocho años. Muere en Valladolid en 1461, “Edificó este Prelado una casa en Valladolid frente de la Parroquia de S. Esteban, y estando en un andamio mirando la nueva fábrica, cayó de él, y murió en veinte y siete de Abril de mil quatrocientos sesenta y uno, dándole sepultura en la Iglesia de Santa Maria de Aniago, en donde yace, sin que se sepa el epitafio que le pusiéron. Su lugar de enterramiento fue concretamente la iglesia de la cartuja de Santa María de Aniago en Villanueva de Duero. Situada a unos 17 Kilómetros de Valladolid, en el partido judicial de Olmedo, en la confluencia de los ríos Duero y Adaja. La Cartuja fue fundación de la reina doña María de Aragón, esposa de su primo hermano Juan II de Castilla. Fundada el 18 de octubre de 1441, pronto tuvo que sufrir, por la muerte de la reina María, la ausencia de unos benefactores que permitieran su subsistencia. Fue una de las cartujas más pobres de España y solo pudo mantenerse en pie gracias a la caridad de los monasterios vecinos de Miraflores, Jerez y Las Cuevas. Hoy está en ruinas. Por la promoción de don Pedro de Castilla y Eril al obispado de Palencia, se dio el de Osma a don Roberto de Moya.




[1] Obispos de Osma.
Alonso Carrillo de Albornoz. Administrador, 1411-1426; en 1422 es nombrado obispo de Sigüenza.
Juan de Cerezuela y Luna (1426-1432, nombrado arzobispo de Sevilla.
Pedro de Castilla y de Eril (1432-1440, nombrado Obispo de Palencia.
[2] Arzobispos de Toledo.
1403-1414, Pedro de Luna, sobrino del Papa Luna. Era el Para Luna tío abuelo del Condestable.
1415-1422, Sancho de Rojas.
1423-1434, Juan Martínez de Contreras.
1434-1442, Juan de Cerezuela y Luna.





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