El valle de los templos de Agrigento, (antigua Akragas y Agracante) patrimonio de la humanidad fue descrito por Píndaro como “la más hermosa de las ciudades mortales”.
Fundada en el 580 a.c conservó su esplendor hasta el 406 a.C. cuando los cartagineses sitiaron y saquearon la ciudad que albergaba 200.000 habitantes. De nuevo en época romana Agrigento gozó de importancia en el siglo III a.C. hasta su decadencia final con la llegada de bizantinos y cristianos que arrasaron sus templos paganos.
Abandonada hasta que se convierte en recinto arqueológico.
Los templos griegos de Agrigento son todos de estilo dórico.
Su estado de conservación varía en función de cómo les afectaron terremotos y expolios.
La «zona arqueológica de Agrigento» está considerada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 1998.
El Parque Arqueológico del Valle de los Templos es un enorme yacimiento de 1300 hectáreas que custodia un patrimonio monumental y paisajístico extraordinario.
Tumba de Terón
Terón fue un tirano griego de Agrigento a partir del 488 a. C. y pronto estuvo relacionado con Gelón, quién por esta época tenía una posición fuerte en Gela y a partir del 485 a. C. también de Siracusa.
Más tarde Gelón se convirtió en el yerno de Terón.
Terón le hizo la guerra a la ciudad de Selinunte y al tirano
de Hímera, llamado Terilo. Por ello Terilo buscó establecer una alianza con
Cartago. Terón capturó Hímera pero a su vez fue sitiado en dicha ciudad por un
ejército cartaginés, ayudado por Terilo. Terón recibió ayuda de Gelón, quién,
en el 480 a. C., obtuvo una gran victoria fuera de las murallas de Hímera, lo
que simbolizaba un triunfo sobre el helenismo occidental en una época en que
las ciudades griegas ganaron la batalla de Salamina.
Bajo el reino de Terón, Agrigento junto con Siracusa y
Selinunte (que era procartaginesa) formaron una especie de «triunvirato» que
dominaría la Sicilia griega de esa época.
Terón murió en el 473
a. C. y fue sucedido durante un breve lapso por su hijo Trasideo, antes de que
éste fuera desplazado por Hierón I, el hermano de Gelón, y Agrigento quedara
bajo el control de Siracusa.
Terón fue un gran aficionado al arte y, como hombre culto
que era, hizo de Agrigento una de las
más bellas ciudades griegas.
El poeta Píndaro estuvo en su corte y le dedicó dos odas
olímpicas.
El término Valle de los Templos es equívoco, dado que más
que un valle, las construcciones se asientan en una crestería en las montañas
que rodeaban la ciudad por el sur.
Comprende una amplia zona sagrada en la parte sur de la
antigua ciudad donde se construyeron, durante los siglos VI y V a. C., siete
templos griegos monumentales hexástilos en estilo dórico. Actualmente excavados
y en parte restaurados, constituyen parte de los edificios griegos más antiguos
y mejor conservados fuera de la propia Grecia. Sus denominaciones y respectivas
identificaciones, excepto la del Olimpieon o Templo de Zeus Olímpico, se cree
que son meras especulaciones humanísticas, aunque siguen siendo utilizadas
habitualmente.
Los templos mejor conservados son dos edificios muy
parecidos, atribuidos tradicionalmente a las diosas Juno Lacinia y Concordia
(aunque los arqueólogos creen que esta atribución es incorrecta). Ambos fueron
construidos según un diseño períptero hexástilo
Vía que enlaza los Templos
Monumento a las victimas de la Mafia Siciliana
Zona de la Necrópolis
La necrópolis paleocristiana se encuentra junto al Templo de la Concordia, pues la zona alrededor del templo fue más tarde reutilizada por los primeros cristianos como una catacumba, con tumbas extraídas de los acantilados y afloramientos rocosos.
Foro
Canales por donde discurrían las piedras para tallar las columnas de los Templos