El Palacio Arzobispal fue primero fue una fortaleza mudéjar mandada construir en 1209 por el arzobispo Rodrigo Jiménez de Rada (1209 – 1247), como residencia temporal de los arzobispos de Toledo.
En 1308 se reunieron los reyes Fernando IV de Castilla y Jaime II de Aragón para acordar y firmar el Tratado de Alcalá de Henares por el cual se repartían los territorios conseguidos a las taifas andalusíes durante la Reconquista.
También en el siglo XIV, el arzobispo Pedro Tenorio (1377 – 1399) reconstruirá el edificio fortificándolo. Construyó un patio de armas, de planta rectangular, de más de 2 hectáreas de superficie. Rodeado por una muralla con 21 torreones; todos de planta rectangular menos la albarrana de planta pentagonal, y el adjunto a ésta de planta semicircular. Actualmente quedan 16 torreones, destacando el "Torreón de Tenorio" nominado en recuerdo del arzobispo.
En el siglo XV, el arzobispo Juan Martínez Contreras (1423 - 1434) edificará el ala oriental, adornada con amplios ventanales góticos, el Antesalón y el Salón de Concilios. Estos dos últimos estaban comunicados por un gran arco túmido (en herradura apuntada), y cubierto por un formidable artesonado gótico-mudéjar.
El 20 de enero de 1486, aquí se celebró la primera entrevista entre la reina Isabel I de Castilla con Cristóbal Colón para financiar el viaje a las Indias.
En 1524 el arzobispo Alonso de Fonseca y Ulloa (1523 - 1534) encargará al arquitecto Alonso de Covarrubias la construcción del ala occidental, con sus patios y su magnífica escalera. Su sucesor, el cardenal Juan Pardo de Tavera (1534 – 1545), terminaría las obras.
Isabel la Católica
Catalina de Aragón. Estatua de Catalina de Aragón bajo la Torre de Tenorio.
Escudo del cardenal-infante Luis de Borbón y Farnesio, en la fachada principal del Palacio arzobispal de Alcalá de Henares.
El Palacio arzobispal de Alcalá de Henares es un palacio fortaleza situado en el centro histórico de Alcalá de Henares.
Es actualmente sede de la Diócesis de Alcalá de Henares.
Se encuentra en la plaza del Palacio y forma parte del conjunto monumental declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO
.
Residencia de los arzobispos de Toledo y señores de Alcalá desde el siglo XIII.
Rodrigo Jiménez de Rada encargó las primeras obras en el siglo XIII.
Un desgraciado incendio lo devastó en 1939, ya terminada la Guerra Civil Española.
Ardieron los fondos documentales del Archivo Central del Estado y se vinieron abajo excelentes obras como el artesonado mudéjar del Salón de Concilios o el Patio de Fonseca.
Durante toda su existencia albergó en su interior los archivos de la diócesis de Toledo. Posteriormente sus instalaciones se utilizaron para la custodia de las Escribanías Notariales y las de Rentas del partido judicial. Y desde 1858 hasta 1939 fue el Archivo General Central de Alcalá de Henares.
Ante la saturación del Archivo de Simancas y su distancia a la Corte de Madrid, se determinó la creación del Archivo General Central en 1858 en el Palacio Arzobispal, tras su cesión al Estado para este fin. Este Archivo recibía documentación procedente de los Ministerios y de los organismos suprimidos tras la reforma de 1834. Transcurridos los plazos reglamentarios se reenviaban los documentos al Archivo Histórico Nacional, hasta que en 1939 un incendio destruyó el Archivo General Central. Su sucesor, desde 1969, es el Archivo General de la Administración (AGA), también en Alcalá de Henares.
En la actualidad, desde 1991, es la sede del Obispado de Alcalá de Henares, y residencia del Obispo.
En su fachada destaca el blasón del cardenal infante Luis Antonio de Borbón y el Torreón de Tenorio, actual sede de la librería diocesana.
El Palacio Arzobispal tiene recuerdos de sínodos y concilios, de acuerdos regios como el Tratado de Alcalá, por el que los reyes de Castilla y Aragón se repartieron Al-Ándalus y el Ordenamiento de Alcalá (1348) por el que se instituyó un sistema de justicia único para todas las regiones integrante de la Corona castellana.
También acogió a una de las audiencias reales clave en la historia de España, la del 20 de enero de 1486, cuando Cristóbal Colón se reunió con los Reyes Católicos. Fue la primera vez que el navegante se entrevistó con la Reina.
En él moraron y murieron numerosos primados y un rey de España, Juan I.
Otros monarcas lo utilizaron como residencia temporal, lo que permitió que entre sus paredes nacieran Catalina de Aragón, hija de los Reyes Católicos y futura esposa de Enrique VIII, y Fernando de Bohemia, hijo de Juana la Loca y sucesor del emperador Carlos V en el trono alemán.
Entre los edificios de interes ubicados en la misma zona se encuentran el Monasterio Cisterciense de San Bernardo, una de las más originales y bellas iglesias del primer barroco marileño surgida en el año 1617. Destacan las dimensiones de su cúpula, su retabo, las pinturas de Angelo Nardi o su sorprendente Museo de Arte religioso.
En el mismo ámbito se encuentra el Oratorio de San Felipe Neri, que alberga la única congregación masculina de Alcalá, y también el Convento de Dominicos de La Madre de Dios, actualmente sede del Museo Arqueológico de La Comunidad de Madrid donde se conserva la mayoría del patrimoio histórico de la antigua ciudad de Complutum.
No hay comentarios:
Publicar un comentario