Museo de los Orígenes. Antiguo palacio de los condes de Paredes de Nava. Como vecino más ilustre de la Moreria de Madrid debemos censar a San Isidro.
Estuvo en la manzana llamada de la Alcantarilla, nombre anterior de la calle Redondilla, rodeada por estas calles y la de don Pedro, Pedro de Toledo; V marqués de Villafranca a fines del siglo XVI, el palacio de los marqueses de Villafranca del Bierzo, en parte ocupado desde incios del siglo XX por el colegio del Sagrado Corazón y desde 2009 por la sede de la Real Academia de Ingenieros. Atravesaba esta manzana longitudinalmente la muralla cristiana y los alcantarillados de la Villa, de aquí el nombre dado a la manzana y a la calle. Es así que en las inmediaciones de la iglesia de San Andrés vivian los marqueses de Villafranca, frente a ellos los diuqes del Infantado y un poco más abajo los Benavente, todos emparentados entre si, y en la Plaza de la Paja los marqueses de San Vicente del Barco, luego emparentados con los Alba y abuelos de la actual duquesa. Es así que en pocos metros nos encontramos con las residencias madrilenas de algunas de las Casas de la alta nobleza de Castilla.
Junto al Museo la iglesia de San Andrés, la Plaza de los Carros, la del Humilladero y la de Puerta de Moros. Vista de la iglesia de San Andrés desde la calle de los Mancebos.
Callejeando por el barrio mudejar de Madrid.
Estuvo en la manzana llamada de la Alcantarilla, nombre anterior de la calle Redondilla, rodeada por estas calles y la de don Pedro, Pedro de Toledo; V marqués de Villafranca a fines del siglo XVI, el palacio de los marqueses de Villafranca del Bierzo, en parte ocupado desde incios del siglo XX por el colegio del Sagrado Corazón y desde 2009 por la sede de la Real Academia de Ingenieros. Atravesaba esta manzana longitudinalmente la muralla cristiana y los alcantarillados de la Villa, de aquí el nombre dado a la manzana y a la calle. Es así que en las inmediaciones de la iglesia de San Andrés vivian los marqueses de Villafranca, frente a ellos los diuqes del Infantado y un poco más abajo los Benavente, todos emparentados entre si, y en la Plaza de la Paja los marqueses de San Vicente del Barco, luego emparentados con los Alba y abuelos de la actual duquesa. Es así que en pocos metros nos encontramos con las residencias madrilenas de algunas de las Casas de la alta nobleza de Castilla.
Reja del palacio de los Benavente.
Iglesia de San Pedro.
Vistas de las torres de la cercana basílica de San Miguel.
La calle de Segovia cierra el barrio de la Moreria por el norte.
Calles de don Pedro y San Isidro.
Aqui estuvo el palacio de los duques del Infantado.
Palacio de los Bena
vente. Al fondo la torre de la iglesia de San Pedro el Viejo. Plaza de la Cruz Verde en la calle Segovia.
Junto a la plaza de la Cruz Verde. Debe su nombre a un desaparecido rollo jurisdiccional que hubo aquí. Los rollos jurisdiccionales eran unas columnas de piedra que podían estar o no decoradas y que solían estar rematadas por una cruz de hierro. Estos rollos fueron en un principio uno de los símbolos de las villas que contaban con privilegios pero, con el tiempo tomaron otra función más siniestra, la de “picotas” un lugar en donde se exponían los cuerpos o los restos, normalmente las manos y cabezas, de los ajusticiados. La mayoría de los rollos fueron derribados en el siglo XIX por un decreto de las cortes de Cádiz pero, todavía hoy, podemos encontrar rollos jurisdiccionales en muchos puntos de España. 
El viaducto visto desde la calle de Segovia.
Iglesia de San Pedro.
Vistas de las torres de la cercana basílica de San Miguel.
La calle de Segovia cierra el barrio de la Moreria por el norte.
Calles de don Pedro y San Isidro.
Aqui estuvo el palacio de los duques del Infantado.
Palacio de los Bena
vente. Al fondo la torre de la iglesia de San Pedro el Viejo. Plaza de la Cruz Verde en la calle Segovia.
Junto a la plaza de la Cruz Verde. Debe su nombre a un desaparecido rollo jurisdiccional que hubo aquí. Los rollos jurisdiccionales eran unas columnas de piedra que podían estar o no decoradas y que solían estar rematadas por una cruz de hierro. Estos rollos fueron en un principio uno de los símbolos de las villas que contaban con privilegios pero, con el tiempo tomaron otra función más siniestra, la de “picotas” un lugar en donde se exponían los cuerpos o los restos, normalmente las manos y cabezas, de los ajusticiados. La mayoría de los rollos fueron derribados en el siglo XIX por un decreto de las cortes de Cádiz pero, todavía hoy, podemos encontrar rollos jurisdiccionales en muchos puntos de España. 
El viaducto visto desde la calle de Segovia.Mudéjar: Viene del vocablo árabe "mudayyan" que significa "aquel al que se le ha permitido quedarse", utilizado desde el siglo XIII. Designa a los musulmanes españoles que permanecieron viviendo en territorio conquistado por los cristianos, y bajo su control político, durante el proceso de avance de los reinos cristianos hacia el sur. Se les permitió seguir practicando la religión islámica, utilizar su lengua y mantener sus costumbres. Se organizaban en comunidades denominadas aljamas o morerías con diversos grados de autogobierno, según las condiciones de rendición, o de subordinación. Reconquistada Madrid a fines del siglo XI los judios seguirán habitando la zona alta junto al Alcazar y los musulmanes lo harán en en los alrededores de la iglesias de San Andrés y San Pedro, al sur del tramo de la actual calle mayor que discurría entre la puerta de la Vega y el arco de Santa María, junto a la iglesia de Santa María de la Almudena, y de la actual calle del Sacamento. Estos tramos se denominaban calle Real. Junto a al actual calle de Segovia, en las inmediaciones de la plaza de la Cruz Verde, estaban los baños públicos.
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