Calle de Espoz y Mina. Al fondo el edificio que se levanta en el solar que ocupaba el hospital del Buen Suceso que cerraba la Puerta del Sol por su lado este. Se encuentra en esta calle el Pasaje de Matheu. Zona de bares y tapeo. Estaba en esta manzana, ya en la carrera de San Jéronimo esquina a la Puerta del Sol, el convento de la Victoria, frente al hospital del Buen Suceso, que ocuparia el solar sobre cuyas casas se levantaron las que vemos al fondo de la calle.
El convento de la Victoria de la orden de religiosos de San Francisco de Paula-, fue fundado en 1561 por el Padre provincial de la Orden, Fray Juan de Vitoria, bajo la advocación de Nuestra Señora de la Victoria. Aunque fundado por la propia orden, el origen de este convento va a estar muy ligado a Felipe II y su mujer, Isabel de Valois, quien era muy devota de estos religiosos. Así, los monarcas solucionaron las trabas que a la fundación de este convento pusieron la propia Villa y los agustinos de San Felipe el Real, pudiéndose dar la primera misa el 7 de agosto de 1561, en presencia del Príncipe Carlos. Desde el punto de vista de su arquitectura, debió ser un edificio poco notable, siendo el único elemento a destacar la capilla de Nuestra Señora de la Soledad, en cuyo interior se veneraba una imagen de dicha Virgen, que realizada por Gaspar Becerra fue donada al convento por la reina Isabel de Valois. Muy dañado durante la invasión francesa, fue desamortizado en 1836, siendo demolido en su totalidad. En su lugar se abrió la calle Espoz y Mina, y se construyeron varios edificios de viviendas, además de un pasaje comercial llamado de Matheu.
El convento de la Victoria de la orden de religiosos de San Francisco de Paula-, fue fundado en 1561 por el Padre provincial de la Orden, Fray Juan de Vitoria, bajo la advocación de Nuestra Señora de la Victoria. Aunque fundado por la propia orden, el origen de este convento va a estar muy ligado a Felipe II y su mujer, Isabel de Valois, quien era muy devota de estos religiosos. Así, los monarcas solucionaron las trabas que a la fundación de este convento pusieron la propia Villa y los agustinos de San Felipe el Real, pudiéndose dar la primera misa el 7 de agosto de 1561, en presencia del Príncipe Carlos. Desde el punto de vista de su arquitectura, debió ser un edificio poco notable, siendo el único elemento a destacar la capilla de Nuestra Señora de la Soledad, en cuyo interior se veneraba una imagen de dicha Virgen, que realizada por Gaspar Becerra fue donada al convento por la reina Isabel de Valois. Muy dañado durante la invasión francesa, fue desamortizado en 1836, siendo demolido en su totalidad. En su lugar se abrió la calle Espoz y Mina, y se construyeron varios edificios de viviendas, además de un pasaje comercial llamado de Matheu.
Conflueye en la plaza de Jacinto Benavente con la calle Carretas. Nos lleva la calle de la Cruz al Barrio de las Letras.
Cruz en recuerdo a los pergrinos de Santiago en la confluencia de la calle Carretas con la plaza de Jacinto Benavente, junto al centro gallego que se encuentra en la plaza de Jacinto Benavente.
Plaza de Jacinto Benavente. Su origen es la antigua Plaza de la Aduana Vieja, antes Plazuela de la Leña. La antigua casa de la aduana, también conocida como aduana vieja, fue construida en 1645 en la desaparecida plazuela de la Leña, hoy tambien calle de la Bolsa. No era una casa muy notable y sus oficinas en principio tenían capacidad para realizar las funciones propias de su actividad, aunque pronto se vieron desbordadas por el creciente número de competencias que sucesivamente se le iban encomendando. Así, durante el siglo XVIII se hizo cargo de las diferentes Direcciones de Rentas Generales y Provinciales del reino y de las no menos importantes rentas estancas de la Corona, como el tábaco, sal, naipes, aguardientes, vidrio. Viendo la necesidad que se tenía de un edificio más espacioso y en mejor disposición, Carlos III encargó en 1761 a Francisco Sabatini el proyecto de construcción de una nueva casa de la aduana en la calle de Alcalá. Estaba en la Plaza de Jacinto Benavente la Casa de los Cinco Gremios Mayores, sedería, pañería, lencería, joyería y mercería, luego sede del Banco de España desde 1847 a 1891.
Cárcel de la Corte. Situada en la plaza de la Provincia, fue mandada construir por Felipe IV en 1629 para albergar las dependencias de la Sala de Alcaldes de Casa y Corte con sus escribanos y de la Cárcel de Corte, donde ya estaba la cárcel de la Villa desde 1540 en casas de esta Plaza. A este organismo se le denominaba Provincia por ello el nombre anterior de la Plaza. Aunque durante mucho tiempo se atribuyó la autoría del edificio a Juan Bautista Crescenci lo fue de Juan Gómez de Mora, y las obras de construcción fueron dirigidas por Cristóbal Aguilera entre 1629 y 1636, junto con otros arquitectos madrileños de la talla de José de Villareal, Bartolomé Hurtado García y José Olmo. La estrechez de algunas de las dependencias y la falta de espacio obligaron a ampliar y reformar el inmueble, como se desprende de las obras que se realizaron entre 1648 y 1662 y entre 1662 y 1670. En 1767 se dispuso que sólo permanecieran en el palacio las dependencias de la Sala de Alcaldes de Casa y Corte, trasladándose la cárcel al Oratorio Salvador del Mundo, a espaldas del edificio, donde estuvo hasta 1846 en que fue trasladada a la Cárcel del Saladero. Un incendio ocurrido en 1791 destruyó casi por completo la cubierta del edificio y la torre con capitel que daba a la calle del Salvador. En la actualidad alberga las dependencias del Ministerio de Asuntos Exteriores.
Matadero de cerdos El Saladero. Situado junto a la puerta de Santa Bárbara de la muralla de Felipe IV y frente al convento de Santa Bárbara, en las inmediaciones de Alonso Martinez. Fue construido por Ventura Rodríguez en 1768 como casa para la matanza de cerdos, saladero y provisión de tocino. Se trataba de un caserón típicamente dieciochesco, de tres pisos, y con una fachada sencilla pero bella. En su interior se encontraban instaladas todas las oficinas necesarias, las cuales, estaban acomodadas con buen acierto. Desde principios del siglo XIX, el edificio se destinó a Cárcel de Villa, y más tarde de Corte y correccional de jóvenes. Estuvo en funcionamiento hasta el 9 de mayo de 1884, en que fue sustituido por la Cárcel Modelo, situada en la plaza de la Moncloa. Derribado en 1885, en su lugar se construyó en palacio de la Marquesa de Guevara, ocupado hoy por una entidad bancaria.
Placa que señala la primitiva localización de la iglesia de Santa Cruz en la plaza de este nombre y antes de la Provincia, centro del arrabal de su nombre junto a la Plaza Mayor.
Placa que señala la primitiva localización de la iglesia de Santa Cruz en la plaza de este nombre y antes de la Provincia, centro del arrabal de su nombre junto a la Plaza Mayor.
Junto a la plaza Mayor. Según las ordenanzas de los gremios, el comercio tradicional de estas vías eran el de mercería, especiería y droguería. El nombre de Postas se debe a la antigua casa de postas que había desde el siglo XVI en la casa señalada con el número 32, actual 16, primera oficina de correos y postas que hubo en Madrid. En la calle de Postas está la Posada del Peine.
Situada junto a la Plaza Mayor. Estaba aquí una de las puertas de la primera muralla cristiana.
Fachada de la conocida como Casa de Cisneros en la Plaza del Cordón.
Del Pretil de los Consejos, junto a la catedral castrense de San Miguel y el palacio de los duques de Uceda, arranca la calle del Sacramento.
Las casas por donde pasa la comitiva desparecen con la ampliación del ancho de la Calle Mayor, dando así espacio para levantar el monumento a las Victimas en el Pretil de los Concejos y vista al palacio de Uceda.
Del Pretil de los Consejos, junto a la catedral castrense de San Miguel y el palacio de los duques de Uceda, arranca la calle del Sacramento.
Las casas por donde pasa la comitiva desparecen con la ampliación del ancho de la Calle Mayor, dando así espacio para levantar el monumento a las Victimas en el Pretil de los Concejos y vista al palacio de Uceda.
El 31 de mayo de 1906, al menos 28 personas perecieron y un centenar resultaron heridas en el intento de asesinato del rey Alfonso XIII en la calle Mayor. Ese día iba a ser una jornada de alegría y fiesta, ya que la iglesia de los Jerónimos albergaba la boda del rey con la princesa Victoria Eugenia de Battemberg. Al paso del cortejo por el número 88 de la calle Mayor, esquina a Bailén frente a la parroquía de Santa María de la Almudena, el rey y su esposa eran el objetivo de un ramo de flores: un obsequio lanzado por el anarquista catalán Mateo Morral, que ocultaba en su interior una bomba y que no cayó sobre la carroza real, pero acabó con la vida de al menos 28 personas y dejó casi un centenar de heridos. El anarquista, de 26 años, fue detenido dos días después por un guardia civil al que mató antes de suicidarse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario