En el plano de Texeira es el edificio con el número LXI.
El primer hospital de San Juan de Dios fue fundado en 1552 por el hermanoAntón Martín en unos terrenos de la calle Atocha que habían sido cedidos por Fernando Somonte y su mujer Catalina Zapata. Fallecido Antón Martín el 24 de diciembre de 1553, dispuso que los hermanos hospitalarios que le habían acompañado heredaran la casa y sus bienes para así continuar la obra del hospital. Desde un punto de vista médico, el hospital se especializó en enfermedades venéreas e infecciosas como la tiña o la sarna. En cuanto a sus dependencias, a comienzos del siglo XVII tenía 10 salas, seis para hombres y cuatro para mujeres, con un total de 243 camas, si bien, a mediados del siglo XIX llegó a sostener a 1612 enfermos anuales. Del edificio, destacaba la iglesia, construida en 1552 y reedificada en 1798. Con la desamortización de Mendizábal en 1836, el hospital pasó a la beneficencia provincial, aunque por un convenio con el gobierno, los padres hospitalarios siguieron regentándolo, eso si, sin el carácter de orden religiosa. En 1856 se hizo cargo del establecimiento la Junta Provincial, que lo puso bajo la autoridad del Hospital Provincial. No obstante, en 1858 se volvieron a separar ambos establecimientos. A finales del siglo XIX, se pensó en trasladar el hospital a un nuevo edificio en la zona del ensanche este, entorno a la calle Ibiza, procediéndose a su traslado a finales de 1897. Fue entonces cuando se demolió la parte del antiguo edificio destinada a hospital. Sobrevivió la iglesia, que desde 1891, había pasado a albergar la parroquia de San Nicolás y el Salvador, la cual, destruida durante la Guerra Civil, fue reconstruida posteriormente. En parte del solar del Hospital se abre el Pasaje Doré y el cine Doré de la Filmoteca Nacional.
El primer hospital de San Juan de Dios fue fundado en 1552 por el hermanoAntón Martín en unos terrenos de la calle Atocha que habían sido cedidos por Fernando Somonte y su mujer Catalina Zapata. Fallecido Antón Martín el 24 de diciembre de 1553, dispuso que los hermanos hospitalarios que le habían acompañado heredaran la casa y sus bienes para así continuar la obra del hospital. Desde un punto de vista médico, el hospital se especializó en enfermedades venéreas e infecciosas como la tiña o la sarna. En cuanto a sus dependencias, a comienzos del siglo XVII tenía 10 salas, seis para hombres y cuatro para mujeres, con un total de 243 camas, si bien, a mediados del siglo XIX llegó a sostener a 1612 enfermos anuales. Del edificio, destacaba la iglesia, construida en 1552 y reedificada en 1798. Con la desamortización de Mendizábal en 1836, el hospital pasó a la beneficencia provincial, aunque por un convenio con el gobierno, los padres hospitalarios siguieron regentándolo, eso si, sin el carácter de orden religiosa. En 1856 se hizo cargo del establecimiento la Junta Provincial, que lo puso bajo la autoridad del Hospital Provincial. No obstante, en 1858 se volvieron a separar ambos establecimientos. A finales del siglo XIX, se pensó en trasladar el hospital a un nuevo edificio en la zona del ensanche este, entorno a la calle Ibiza, procediéndose a su traslado a finales de 1897. Fue entonces cuando se demolió la parte del antiguo edificio destinada a hospital. Sobrevivió la iglesia, que desde 1891, había pasado a albergar la parroquia de San Nicolás y el Salvador, la cual, destruida durante la Guerra Civil, fue reconstruida posteriormente. En parte del solar del Hospital se abre el Pasaje Doré y el cine Doré de la Filmoteca Nacional.
Antón Martín nació en la localidad conquense de Mira en 1500. Durante su juventud desempeñó varios empleos en distintas localidades cercanas a Valencia. En ese tiempo recibió la noticia de que su hermano había sido asesinado en un pueblo de Granada. La razón es que no se había casado con la hija del dueño de las tierras para el que trabajaba sino con la mujer a la que amaba. Parece que el hermano de la pretendienta rechazada, en un acto de despecho, acabó con su vida.En consecuencia, Antón Martín decide tomarse la justicia por su mano. Su único afán será vengar la muerte de su hermano. Se echa a la calle y subsiste de la forma más ínfima recurriendo a las artes menos deseables.Es en este momento cuando se produce la conversión milagrosa de nuestro protagonista. Parece ser que Juan de Dios, hombre conocido en Granada por recoger a pobres y enfermos y darles cobijo en su pequeño albergue, se encuentra con Antón Martín y le recomienda que perdone al asesino de su hermano. Esta escena es retratada por P. Manuel Trinchera en su grabado “Juan de Dios convierte al espadachín Antón Martín”. A partir de este momento su vida estará dedicada a la obra de Juan de Dios convirtiéndose en su primer discípulo. Trabajarán juntos durante cuatro años en el Hospital de Granada en favor de los más desprotegidos.Tras la muerte de su maestro se encuentra deudas que hay que pagar y por eso decide viajar a Madrid. Es en la Corte donde va a encontrar los apoyos necesarios para fundar el Hospital de Nuestra Señora del Amor de Dios, en la zona de Atocha, más conocido como el Hospital de Antón Martín. Un año después de su puesta en funcionamiento muere. Fue enterrado en 1553 en el Convento de San Francisco. En 1596 sus huesos fueron trasladados a la iglesia del Hospital que él creó. En julio de 1936 dicha iglesia sufrió un incendio quedando totalmente destruida. Curiosamente, el sepulcro de Antón Martín permaneció intacto. Finalmente sus restos mortales descansan en el Hospital Infantil de San Rafael. El Hospital de Antón Martín albergó 200 camas y estuvo dedicado a enfermedades venéreas y de la piel. Funcionó más tres siglos, hasta 1897. Su estado cada vez más ruinoso hizo necesario su traslado al Hospital de San Juan de Dios situado en la Ronda del Doctor Esquerdo. El genuino edificio fue demolido en parte y otra sirvió para instalar el primer cinematógrafo de Madrid, el Cine Doré.
El nuevo hospital de San Juan de Dios. Situado sobre una amplia manzana entre las calles Ibiza, Doctor Esquerdo, Doctor Castelo y Maiquez, continúa la tradición del hospital que en 1552 fundara Antón Martín en la calle Atocha. Dependiente de la beneficencia provincial desde 1856, a finales del siglo XIX y ante la precariedad del establecimiento, se pensó en trasladar el hospital a un nuevo edificio en la zona del ensanche este, entorno a la calle Ibiza. La construcción del nuevo hospital se autorizó mediante R. O. de 6 de febrero de 1890, finalizándose las obras en 1895. El traslado de los enfermos se produjo en septiembre de 1897, si bien, el hospital ya se había empezado a utilizar un año antes con motivo de la epidemia varilosa. Construido según el sistema que ideara el ingeniero francés Tollet: reducir la elevada mortalidad en cuarteles y hospitales mediante un sistema de pabellones aislados que reducían el hacinamiento y facilitaban su constante limpieza. El nuevo hospital contaba con trece pabellones con capacidad para 660 enfermos –cinco de ellos para enfermos contagiosos-, más otros doce dedicados a laboratorio, depósito de cadáveres, y demás servicios generales. Derribado durante la década de 1960, su lugar lo ocupa hoy el Hospital General Universitario Gregorio Marañón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario